¿Es normal que mi bebé no gatee?

¿Es normal que mi bebé no gatee?

Uno de los momentos más esperados en el desarrollo de un bebé es cuando empieza a desplazarse por sí mismo. Para muchas familias, esto se traduce en gatear, una etapa que parece casi obligatoria antes de caminar. Pero, ¿qué ocurre si tu bebé no gatea? ¿Es motivo de preocupación?

La realidad es que no todos los bebés gatean, y eso puede ser completamente normal. Algunos se arrastran, otros se deslizan sentados, y muchos pasan directamente a ponerse de pie y caminar sin haber gateado nunca. Según la American Academy of Pediatrics (AAP), el gateo no es un hito obligatorio del desarrollo y su ausencia no implica necesariamente un problema de salud

¿Cuándo suelen gatear los bebés?

En general, los bebés que gatean lo hacen entre los 6 y 10 meses de edad, aunque hay una amplia variabilidad. Algunos lo hacen antes y otros después. También es frecuente que, al inicio, los movimientos no sean exactamente "gatear" en el sentido clásico, sino combinaciones como:

• Arrastrarse boca abajo (conocido como "el estilo comando")
• Avanzar hacia atrás antes de ir hacia adelante
• Dar pequeños saltitos sentados

¿Por qué algunos bebés no gatean?

Hay muchos factores que influyen en si un bebé gatea o no. Algunos de los más comunes son:

• Temperamento y curiosidad: algunos bebés están más interesados en ponerse de pie o caminar.
• Superficies del hogar: el suelo puede no ser ideal para el gateo (alfombras gruesas, suelos duros, poco espacio).
• Tiempo boca abajo (tummy time): si el bebé ha pasado poco tiempo en esta posición, puede haber menos motivación o fuerza para gatear.
• Preferencias motoras: algunos bebés desarrollan otras formas de desplazamiento que les resultan más cómodas.

“El gateo es una estrategia más entre muchas que los bebés pueden utilizar para explorar el mundo, pero no es imprescindible para un desarrollo neurológico saludable.”

¿Cuándo debo preocuparme si mi bebé no gatea?

No gatear por sí solo no suele ser un motivo de alarma. Sin embargo, sí es importante prestar atención al conjunto del desarrollo motor. Consulta con tu pediatra o profesional de referencia si observas alguno de estos signos:

• Tu bebé no se sienta sin apoyo a los 9 meses.
• No muestra ningún intento de desplazarse por sí solo (ni siquiera rodar o arrastrarse).
• Parece tener rigidez o flacidez muscular.
• Usa siempre el mismo lado del cuerpo o arrastra una pierna de forma evidente.

En estos casos, puede ser útil una valoración por parte de un especialista en desarrollo o fisioterapia pediátrica.

No todos los bebés gatean, pero eso no significa que haya un problema.

¿Cómo puedo estimular el gateo (si lo deseo)?

Si quieres favorecer el gateo de tu bebé, hay formas respetuosas y seguras de estimularlo:

• Tiempo boca abajo desde recién nacido, siempre bajo supervisión.
• Colocar juguetes a poca distancia para animarle a moverse.
• Sentarte en el suelo con él o ella, creando motivación para acercarse.
• Evitar el uso excesivo de hamacas, columpios o andadores que limitan el movimiento libre.

Recuerda que lo importante no es que gatee, sino que tenga oportunidades de explorar y moverse libremente. Cada bebé sigue su propio ritmo, y lo esencial es acompañarlo con paciencia, amor y confianza.