¿Qué es el puerperio y cuánto dura? Guía completa del posparto
El puerperio, también conocido como cuarentena o etapa posparto, es un periodo fisiológico, emocional y socialmente intenso que comienza tras el nacimiento del bebé y se extiende hasta que el cuerpo de la madre recupera, en gran parte, las condiciones previas al embarazo. Abarca mucho más que una recuperación física: implica un reajuste hormonal, la instauración de la lactancia, el vínculo con el recién nacido y un proceso de adaptación psicológica a la maternidad.
¿Cuánto dura el puerperio?
Aunque popularmente se habla de “los 40 días”, la duración real del puerperio no es exacta ni igual para todas las mujeres. Tradicionalmente se ha dividido en tres fases:
- Puerperio inmediato: abarca las primeras 24 horas tras el parto. Es una etapa crítica donde se vigilan las constantes vitales, la contracción uterina, la pérdida de sangre y la primera toma del bebé si se opta por lactancia.
- Puerperio clínico o mediato: va desde el segundo día hasta el décimo aproximadamente. Aquí se produce una intensa regresión uterina, descenso hormonal, aparición de loquios (secreción vaginal) y adaptación inicial a la lactancia.
- Puerperio tardío: se extiende desde el día 10 hasta las 6-8 semanas tras el parto, aunque algunas funciones hormonales, emocionales y sexuales pueden tardar hasta 6 meses o más en estabilizarse, especialmente si hay lactancia materna exclusiva.
Según el American College of Obstetricians and Gynecologists (ACOG), el seguimiento posparto no debería limitarse a una sola consulta a las 6 semanas, ya que el puerperio puede durar hasta un año en algunos aspectos físicos y mentales.
El puerperio es una etapa de recuperación integral: cuerpo, mente y vínculo.
Cambios físicos durante el puerperio
Durante el puerperio, el cuerpo inicia una recuperación progresiva. Algunos cambios habituales incluyen:
- Involución uterina: el útero regresa a su tamaño pregestacional. Este proceso puede generar molestias similares a contracciones, llamadas entuertos, especialmente en lactancia.
- Loquios: son secreciones vaginales que evolucionan de rojo a marrón y luego a blanquecino. Su duración normal es de 4 a 6 semanas.
- Suelo pélvico debilitado: es frecuente notar escapes de orina, sensación de peso o dificultad al retener gases.
- Cambios en las mamas: aumento de volumen, subida de leche y, a veces, congestión o grietas.
- Estreñimiento y hemorroides: comunes tras el parto vaginal.
Cambios emocionales y psicológicos
El equilibrio emocional en el posparto puede ser muy vulnerable. Aproximadamente un 80% de las madres experimentan lo que se conoce como baby blues: un estado de tristeza leve, llanto fácil, irritabilidad o ansiedad, que aparece entre el segundo y quinto día y desaparece sin intervención médica.
Sin embargo, un 10-15% pueden desarrollar depresión posparto, una condición más grave que requiere seguimiento profesional. En casos menos frecuentes, puede aparecer una psicosis posparto.
Según la Organización Mundial de la Salud, es esencial que los sistemas sanitarios incluyan el bienestar mental materno como parte del cuidado integral posparto.
"El posparto no es el final del parto, sino el comienzo de una nueva vida para la madre y el bebé."
¿Cuándo tener relaciones sexuales o hacer ejercicio?
En ausencia de complicaciones, se recomienda esperar al menos 6 semanas para retomar las relaciones sexuales con penetración, aunque lo más importante es que la mujer se sienta cómoda, sin dolor y emocionalmente lista.
Respecto al ejercicio, se puede comenzar con movimientos suaves como caminatas desde los primeros días si el cuerpo lo permite, pero es ideal iniciar ejercicios específicos para el suelo pélvico y abdomen (como hipopresivos o Kegel) después de una evaluación profesional.
Revisión posparto: una cita clave
La visita médica de revisión posparto, generalmente entre las 6 y 8 semanas, es fundamental para:
- Comprobar la involución uterina
- Evaluar el suelo pélvico y la cicatrización (episiotomía, cesárea, desgarros)
- Hablar sobre anticoncepción y sexualidad
- Evaluar el estado emocional y el establecimiento de la lactancia
La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) resalta que esta visita debe adaptarse a cada caso e incluso adelantarse si hay signos de alarma.
Es importante buscar atención médica si aparecen:
- Fiebre mayor a 38 °C
- Sangrado abundante (más de una compresa por hora)
- Dolor abdominal intenso y persistente
- Mal olor en los loquios
- Dolor al orinar o incontinencia severa
- Tristeza profunda, insomnio grave o pensamientos negativos
Nunca dudes en consultar con una matrona o profesional de salud ante cualquier síntoma preocupante.
Este artículo no sustituye atención médica